Mátrix-Cacería

Mátrix puede ser asociado a muchas metáforas o analogías, como a una Cacería constante en el cielo en la que participan pájaros-almas (no personas-humanos).

Desde un punto de vista espiritual todos los participantes de la "cacería" son almas que vuelan (inconscientemente)

en el cielo-espacio-vacío 4D, si bien unas pocas almas (las controladoras) se lo han ocultado y han logrado hacérselo olvidar y hacerles creer que son otra cosa, y que el auténtico vuelo y cielo es una recompensa en un tiempo futuro según méritos contraidos en el presente.

En la "Cacería" participan buitres, águilas y palomas, que son la analogía de las emociones o realidades que se proyectan como "personas-humanas" (los "buitres y águilas") y como "pensamientos" (las "palomas") en la Proyección Humana del Alma-emociones.

Los buitres son los controladores del cielo libre.

Establecen las propias reglas de la Cacería-Mátrix. Ocultan

a las águilas la verdad: que son libres y ya son en el cielo, y para ello ofrecen el señuelo soltando a las palomas, que simbolizan las "creencias" o las "noticias catastróficas de los medios de comunicación", y les hacen creer que ése es su alimento y que cuanto más información tengan y más se aferren y lo crean mayor es su seguridad de éxito en el futuro. En toda esa información negativa sin embargo aumenta el "temor" o ruido mental de las águilas cuya mente llena les pesa para volar.

La principal creencia soltada al aire por los buitres es que las águilas-almas crean que ellas son su proyección humana, y no su realidad de águilas, pero ellas no son las proyecciones-personas, sino que los cuerpos de las personas son encarnación o proyección de las almas.

Las almas están controladas por las reglas de los buitres, que consiste en que cuantas más palomas-pensamientos cacen más puntos ganan ante del Gran Buitre (Dios, que realmente es el Dragón del Tiempo).

Se les hace creer que cazar palomas es la única opción que existe. Así existen grupos mentales de águilas-almas a modo de "países" en el continente Mente, lo cual en la Proyección Humana se refleja en las religiones organizadas, partidos políticos y en los propios países territoriales.

De esta forma los buitres sueltan palomas-creencias y las águilas se dedican a cazarlas al vuelo inconscientemente, pues creen que ése es su alimento, su esperanza y sus puntos. Las palomas quedan atrapadas en las garras de las águilas.

Lógicamente las pobres palomas chillan y se revuelven al experimentar la falta de libertad, y las águilas se identifican plenamente con las palomas, de forma que en su proyección humana, las personas encierran a los pájaros en las jaulas, reflejando la realidad de su dimensión emocional.

De la misma manera, las águilas en su proyección humana son personas que "ven volar pájaros" y creen que eso es verdad, pero esto sólo ocurre en su sueño, por lo cual están creyendo en la no-realidad, dejándose engañar y juzgando por las apariencias (contrario a los principios de la Sabiduría), de manera que en su dimensión de águila-alma continúan en la no-realidad, no-volando, sin conocerse a sí mismas.

En su inconsciencia de ser ellas las causantes de la falta de libertad de las palomas y de ellas mismas, las águilas reflejan y expresan en la Proyección Humana su frustración hacia las demás águilas que sufren la misma inconsciencia, y sus gritos son los propios de las palomas que han capturado.

Al ser inconscientes y haber convertido la "cacería" en una costumbre, no encuentran la forma de alcanzar la felicidad y la libertad, pues el elemento "medios de comunicación" y la costumbre consumista en su sueño humano les ata aún más a la falta de libertad, aumentada en el engaño de que los productos pueden otorgar esa felicidad o libertad. Mas todo esto es más ruido: el ruido que no cesa de alimentarse a sí mismo.

De esta manera todo el "Cielo Mátrix" se convierte en un hervidero de Ruido Pensamiento Humano o Mente Humana o Humanidad (a modo de Humo que ciega al alma), de gritos de águilas-almas identificadas con la frustración de las palomas-egos que han capturado, lamentándose por el defecto que ven en las demás águilas y que sólo es el mismo suyo, ruido que es el propio alimento de los buitres.

Las águilas se juzgan y acusan unas a otras y ven al "demonio" afuera, cuando el "demonio" es la pobre paloma capturada por cada águila-alma y a la cual no le llaman por su nombre.

Todo esto sería el actual escenario ruidoso del "Cielo del planeta Agua(Tierra)", el supuestamente previo al "cielo futuro" prometido por los buitres y sus creencias.

No es otra cosa que el Tiempo Humano: cuestión de ruido mental que oculta al Silencio Eternidad, ruido del cual se alimenta el Gran Jefe de los buitres: el Dragón del Tiempo, la Bestia en la que todo transcurre y PASA (como el propio Tiempo) y la cual se refleja también en la Proyección Humana a modo de "ruido físico" o "tics tacs" de los relojes, los controladores físicos en el sueño, y que marcan el ritmo de los humanos en la PRISión de la PRISa, los compromisos, las citas, los horarios... sometiendo al alma-águila a la prisión y limitación psicológica correspondiente, cerrándose así el círculo emocional (captura de la paloma: ruido), físico-humano (relojes: ruido) y de nuevo emoción, en una cadena perfecta: un águila-alma capturadora capturada, una cazadora cazada, un águila que estando presa en la Jaula del Pajarero contruida por ella misma, tiene presa a una paloma.

Y la causa simplemente es haber cazado la paloma. Por lo que la solución simple es liberarla, soltarla o perdonarla. Y esto es el PERDÓN. También por todo esto, en su Proyección Humana, las almas se sienten culpables, pues inconscientemente "saben" que "algo inconveniente" han hecho, y eso es "quitarle la libertad a las palomas", si bien todo el ruido mental que ellas mismas provocan les impide a sí mismas escuchar la Verdad: que no son culpables, sino que sólo se han olvidado del Silencio-Sabiduría y Libertad que ellas mismas son en esencia.

Sólo aquellas águilas-almas que en mitad de la estridencia, se apartan del mundo, se silencian y se miran a sí mismas y comprenden ser injustas por impedir la libertad de las palomas, las sueltan y de esta forma regresan a experimentar la Libertad y la Verdad: el Silencio Eternidad, ya sin el control del Tiempo o Ruido, de manera que ya en su dimensión emocional real en el cielo auténtico, pueden "escuchar" y comprender la situación de las demás águilas-almas y descubrir los hilos fundamentales de la "Mátrix-Cacería", a la cual no odian sino que admiran en su simplicidad y genialidad capaz de simular un mundo de sufrimiento enormemente complicado. Toda una Perfección.